Continuando con nuestro compromiso con DIOS, estamos llevando Palabra de Vida a otros. Valga esto tambien como testimonio de ello.
Oramos por aquellos que aceptan al Cristo Jesús en su corazón.
Impresionante aquella abuelita que no se podía ni mover, pero lo decía todo con sus ojos y con su corazón le habló al Señor.
Impresionante verla mandarnos un beso con la mano en su boca cuando nos ibamos.
Impresionante lo que hará EL en su vida.
Gloria a DIOS.
Impresionante tambien aquellos que no quieren volver su corazón a Jesús.
¿Como entonces quieren ventura?
Y si les viene... ¿como no sospechan de donde les viene?
Y si no le hablan... ¿ como les va a escuchar?
Cuando un hijo se empeña en caminar por el borde haciendo equilibrio, el Padre le advierte que no siga por ahí porque se puede caer... y le deja libertad para que aprenda a mantenerse o a caerse si es lo que realmente quiere. Ya que lo que no quiere realmente es hacerle caso. Al final en el mejor de los casos el camino se le hará más dificultoso. Sería más rápido y llano si le hubiera hecho caso. Pero en el peor de los casos si persiste en su tozudez se caerá.
EL nos dice que de todas formas siempre estará ahí esperándonos para cuando le hagamos caso... menuda paciencia. Lo vemos en la parábola del hijo Pródigo.
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