En ella hay Prana, hay energía de VIDA.
Ahí está El ESPÍRITU.
Está lo que necesito... para VIVIR.
El hálito es lo que más NECESITO.
Pero solo me acuerdo de ÉL cuando muero, porque lo necesito.
Y durante toda mi vida no me he acordado de ELLA.
Évita que te roben esa BENDICIÓN a cada segundo.
Sé CONSCIENTE del Espíritu en tu respiración.
Todo empieza como termina... con la Respiración.
Así venimos... así así nos vamos. ¿Deseas morir tú y que nazca Él?
Medita!!!.
Premananda
(Inspirado en el libro: "Experiencias con un Yogui")
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